lunes, 29 de octubre de 2007

Publicidad y sacrificio

Supongo que como yo, habréis visto los carteles en las marquesinas. La prevención del cáncer de mama no es ninguna tontería. Cogido a tiempo tiene muy buena solución. Todas las mujeres a partir de cierta edad o con antecedentes de riesgo, debemos hacernos mamografías de forma periódica.
La prueba en sí consiste en que te coloques en una postura imposible (rodillas flexionadas, cadera atrás, pecho adelante un brazo abajo, otro arriba, la cara hacia un lado...) mientras te colocan una teta entre dos placas metálicas y aprietan hasta que parece que se va a reventar (afortunadamente sólo lo parece); te hacen una placa, te modifican la postura para hacer otra foto en el otro sentido y repiten el proceso con la otra teta. Queda claro que no es nada agradable, pero sí es muy eficaz. Conviene pasar por ello aunque duela porque lo que está en juego es nuestra salud.


Ahora bien, pretender que pase por semejante suplicio apelando a mi abnegación y capacidad de sacrificio por los machos que forman mi familia me resulta tremendamente ofensivo. Prefiero mil anuncios de señoras desnudas para vender coches caros antes que esta humillación inconsciente. Con toda su buena intención (una más para empedrar el infierno) la Asociación Española contra el Cáncer ha resultado la mayor defensora del machismo más cutre. A la campaña de imágenes se unen tres cuñas en las que un niño se dirige a su abuela, un adolescente a su madre y un sesentón a su esposa. Los tres varones.

Las mujeres somos tan buenas (y tan estúpidas) que no somos capaces de cuidarnos por nosotras mismas, pero sí lo haremos por nuestros héroes. Las solteras, las lesbianas, las que no tengan descendencia o sólo tengan hijas... que se jodan porque sus vidas carecen de sentido.

Una campaña paralela a ésta en la que las mujeres se dirigieran a los hombres en los mismos términos para que estos se palpen la próstata habría suavizado mi indignación, pero a nadie se le ha ocurrido. ¿Por qué será?




jueves, 6 de septiembre de 2007

Esta entrada habla de amor

La Ciencia Ficción y la Fantasía son los géneros que más abundan en mi biblioteca así que entenderéis por qué una de "mis series TV" de este verano ha sido Torchwood.


La cargante Eve Myles me espeluzna bastante. En la foto parece mona, pero es que no he encontrado ninguna en la que salga con la boca abierta. Debería estar prohibido que una actriz tuviera los dientes que tiene esta chica salvo que hiciera el papel de bruja. Pero no es de ella de quien quiero hablar, sino de él.


John Barrowman
es el Capitán Jack Harkness. Yo no tenía ni idea de que existieran ni este personaje, ni este señor tan guapo. Un tipo del que sólo sabemos que tiene una gabardina fabulosa y que no puede morir, resultaría atractivo aunque fuera feo de llorar y estaréis conmigo en que no es el caso.
Aún así no entendía yo por qué me atraía tanto el personaje ya que las "fantasiosas" tramas de varios de los episodios dejan bastante que desear.


Viendo (grabado y sin anuncios, como siempre) el penúltimo capítulo (Season 1, Episode 12: Captain Jack Harkness) lo entendí.

Siempre me ha fascinado el amor entre dos hombres. No sólo me resulta excitante ver a dos guapetones besarse a fondo (que también) si no que me emociona adivinar en ellos el deseo y la ternura.

Un viejo chiste hacía referencia a la supuesta cobardía de los "mariquitas" diciendo que había que ser "muy hombre" para besar a un guardia civil con bigote (trasladáos a la mentalidad de los 60) Pues algo de eso debe de haber.

Es difícil encontrar varones adultos que miren a la mujer amada, con el alma abierta, expuesta, entregada, feliz. A los hombres les da mucha vergüenza mostrarse tan desnudos, se sienten indefensos y les cuesta entender que precisamente se trata de eso, de no defenderse.

Pero si un hombre da el paso de amar a otro, se está atreviendo a verse en un espejo. Desoye una supuesta llamada de la naturaleza, supera el atavismo y se pasa por el forro la convención social. Para alguien tan valiente, ser dulce es ser consecuente.

Tal vez por eso para mí son tan viriles dos hombres besándose y me gusta tanto verlo.




Me gusta ver amores de todo tipo en series de argumentos variados como Torchwood o Cinco hermanos y no sólo en horarios nocturnos como Queer as Folk o L.

Yo crecí entendiendo que el Capitán Kirk quería al señor Spock y que Starsky y Hutch eran más que amigos. Era demasiado pequeña para incluir el sexo en aquellas historias, pero los sentimientos no me extrañaban.

Cuando mi hijo sea mayor, este texto será tan pintoresco para él como las pesetas . Esa es una buena noticia

martes, 21 de agosto de 2007

The Importance of Being Earnest...¿de verdad es tan importante?*

Escribir es para mí un ejercicio que necesita ser practicado con asiduidad para no resultarme fatigoso. Es decir: que llevo tanto sin hacerlo que me da pereza. Lo cierto es que mentalmente he escrito varias entradas, pero o se inventa la telepatía por internet o “ni modo”.


Me voy a volver a lanzar a la piscina con una idea a la que le he dado tantas vueltas que no sé por dónde cogerla: El afán por poner (y ponernos) nombres.




Según nuestra cultura “En el principio fue la Palabra...” y la primera labor de Adán fue dar nombre a animales y plantas, así que no voy a negar que “llamar a las cosas por su nombre” debe de estar impreso a fuego en nuestros genes. Pero lo que ya no está tan claro es que esa necesidad de nombrar se utilice para satisfacer otra necesidad, está patológica, de sentirse parte de un grupo que excluye a los que no comparten el mismo nombre.


Haced una prueba (y hacedla a los amigos). Decid sin pensar demasiado, cinco palabras que expliquen grosso modo cómo sois. Si entre esas palabras se incluye algún término religioso (soy cristiano, musulmán, budista, ateo...) político (de izquierdas, de derechas...) de “importancia” (soy ministro, doctor, duquesa...) será cosa de plantearse si tal vez eso que creeis que os define, lo que hace en realidad es separaros del resto de los humanos.


Sé que esto es confuso, ya advertí que me iba a costar explicarme. No pasa nada porque uno diga que es Ministro de lo que sea, si es cierto que se dedica temporalmente a eso; lo malo empieza cuando en esa declaración va implícito un “no sabe usted con quién está hablando”. Tambien es natural que quien crea en la Iglesia de Roma diga que es católico, pero si lo que quiere decir es que es “una persona decente, que cree en el único Dios verdadero”... Eso es lo que yo llamo “patológico”.


Mosca Cojonera está desarrollando en su blog una labor tan interesante como exhaustiva explicando las distintas “filias” o costumbres sexuales. Hay algunas divertidísimas como la de los adictos a las patadas en los huevos y otras francamente repugnantes para mí, pero para gustos están los colores. Lo que cada vez está más claro es que la lista podría ser tan larga como una guía telefónica mundial. Siempre se puede especificar más. Si hay un grupo al que le “ponen” los zapatos, habrá un subgrupo zapatos-rojos y otro zapatos-rojos-charol y...


Entiendo que alguien con un gusto que considere peculiar, quiera saber si hay más humanos con sus mismas apetencias. La necesidad de sentirnos parte de la misma especie tambien forma parte de nuestra esencia. El problema empieza cuando aparecen los “puristas”, los que se autoproclaman poseedores de la verdad única; los que deciden que las cosas son como ellos dicen y si acaso, “toleran” que haya otros que no piensen los mismo, pero esos otros no son auténticos .............................. y en la línea de puntos podéis poner lo que se os ocurra.

(Continuará)


* La tradución al español de la obra de Wilde es "La importancia de llamarse Ernesto" perdiéndose el juego de palabras original entre "Ernest" (nombre que adopta uno de los protagonistas) y "Earnest" que significa serio, formal. Así la traducción sería "La importancia de ser formal", pero en este enlace apuntan una mucho más interesante.

martes, 3 de julio de 2007

Here's to you, Sir Elton



Entre "Your Song" y "Don't let the sun go down on me" hora y media de Elton Jonh en directo, solo con su piano. I. nos ha sorprendido esta mañana con un par de invitaciones para el concierto que acaba de terminar en Villalba.


Hace una noche estupenda en las cercanías de Madrid. El cielo estaba despejado y el sonido ha sido impecable.


Tengo mucha suerte; pensaba que ya no tendría oportunidad de ver a uno de los músicos que me gustan desde siempre...e voilá.


Me he acordado de Rafita. Donde quiera que esté, Daniel siempre será su canción. Y por supuesto, he pensado que papá lo habría (¿lo habrá?)disfrutado.


Sólo lamentar que Sir Elton haya podido molestar con su música a las personas que me rodeaban y necesitaban hablar a gritos por culpa del "ruido".


Yo he cantado, he bailado, no he parado de marcar el ritmo... me lo he pasado genial.


Me queda Billy Joel en el tintero. Seguiré soñando.



miércoles, 20 de junio de 2007

Feliz cumpleaños, Mana



No hay mucho más que decir.
Siempre será tres años más pequeña que yo. Al nacer se adjudicó la mitad de mi hipotética herencia. Vale muchísimo más.

Te copio la letra, Mari porque suscribo todo lo que dice.
Te quiero.



Miss Celie's Blues
Sister, you've been on my mind
Sister, we're two of a kind
So sister, I'm keepin' my eye on you

I betcha think I don't know nothin'
But singin' the blues, oh sister
Have I got news for you, I'm something
I hope you think that you're something too

Scuffin', I been up that lonesome road
And I seen a lot of suns going down
Oh, but trust me
No low life's gonna run me around

So let me tell you something sister
Remember your name, no twister
Gonna steal your stuff away my sister
We sho' ain't got a whole lot of time

So shake your shimmy sister
'Cause honey, the "shug" is feelin' fine

sábado, 9 de junio de 2007

Por los viejos tiempos

Ver a mi amiga P es revivir casi 40 años de historia. Compartimos dos colegios de monjas, la ruta del autocar, el recorrido del 29 y un mismo barrio. Sus padres y hermanos forman parte de mi mitología. La casa que ahora tienen que desmontar permanece intacta en mi memoria: el sonido del piano de la entrada, la altura de las literas de sus hermanos, su madre cosiendo en el salón...

A las dos nos han pasado muchas cosas en estos años, pero a ella le han tocado unas cuantas bastante malas. Lo fantástico es ver inalterable ese peculiar e inteligente sentido del humor que la hace pasar por situaciones pavorosas con más valor que el Guerra.

Pero lo más bonito ( y me voy a poner cursi) es algo que no estaba allí cuando dejamos el colegio: la expresión de su cara cuando sonríe a su marido. Claro que las miradas de él hacia ella son del mismo calibre.

Lo siento chicos, no he podido evitarlo. Como compensación he pillado ésto de Cat Stevens. Fue nuestro primer amor y nuestro primer concierto. Éramos tan crías que nos llevó mi padre.

domingo, 3 de junio de 2007

Ni pizca de gracia



Siempre he pensado que la página infantil del dominical de EL PAIS es para adultos. Al menos a mí no me queda claro qué edad se supone que tienen los niños a los que va dirigida. El mensaje que transmite en casi todas sus viñetas es que los niños son muy listos y los adultos unos memos.

Es un recurso fácil que se ha utilizado miles de veces, pero hace falta la inteligencia de un Quino para crear a Mafalda y los "Quinos" no abundan. Además, Mafalda no es exactamente una tira infantil.

El caso es que yo leo el "Pequeño País" todas las semanas porque me gustan Garfield, Calvin y Hobbes, Zits y las Memorias de Gus. Claro que yo ya soy adulta. He pasado por todas las edades y sé que los niños no entienden el rollo de los mayores y que los papás nos desesperamos con los derroches de imaginación de los críos.

Pero lo que me ha preocupado esta semana es la tira de JORGE cuyas cuatro viñetas reproduzco (y me ha costado lo mío averiguar cómo hacerlo). ¿A qué cabeza pensante se le ha ocurrido equiparar como "broma" los trabajos en condiciones infrahumanas a los que se ven obligados millones de niños en el mundo, con un examen sorpresa?

Voy a aceptar (con cierta nausea, eso sí) que sea un chiste. Los niños son literales, la ironía no es su fuerte. Me gustaría que Sierra i Fabra y Rovira, los ingeniosos autores, tuvieran que trabajar en una mina sudafricana durante un mes. A cambio les eximiría de tener que entregar su laboriosa tira "cómica".

sábado, 26 de mayo de 2007

Algo para picar

Aprender a editar blogs me está volviendo loca. Llevo días intentando averiguar cómo poner el enlace a una canción. Me faltan las claves para entender el inglés aplicado a la informática. Mientras tanto me pongo a buscar por YouTube y se me pasan las horas encontrando joyitas.
Ayer me hice con una colección de videos de Baryshnikov. Lo he visto bailar en directo dos veces, la última hace un año. Cuando el arte me conmueve se me acelera el pulso; la respiración se agita; me sube la temperatura y suelo llorar ya que gritar quedaría raro.
No exagero, sé a qué suena y la verdad es que se parece mucho al placer sexual. Supongo que todos los placeres se asemejan entre sí. Y tambien supongo que por eso los hombres capaces de provocarme esas sensaciones, se convierten en mitos sexuales para mí.
Os dejo un montaje que me gustó por la música. La voz rota, la melodía en tono menor... es como si Tchaikovsky compusiera rock. Y el ruso es un idioma muy poderoso.



miércoles, 23 de mayo de 2007

Ampliando curriculum

El domingo, Pataki nos trajo al parque la oferta de empleo que había recortado de El País.



He solicitado el puesto. Creo que cumplo con todos los requisitos y algunos más. Además tengo tiempo libre.


Bueno, se trata de publicidad. Tienes que darles tus datos para "participar" en el "concurso". Hay 500 "ganadores" a los que les enviarán una muestra y tendrán que contestar un cuestionario. A cambio ellos pueden utilizar tu nombre y tu imagen.
Roza lo poco ético como es habitual en publicidad, pero puede tener su gracia. La pila del cacharrito dura 20 minutos. Me sacrificaré para satisfacer vuestra curiosidad. Ya os contaré si me cogen en el sentido español, no en el venezolano, aunque cuento con el venezolano habitual para desarrollar el trabajo.




miércoles, 16 de mayo de 2007

Marat-Sade: La revolución pendiente



Prometí y/o amenacé con hablar mucho de sexo y evidentemente he mentido como una bellaca. Estoy muy liada arreglando otras parcelas de mi vida y el sexo ha pasado a un plano muy secundario. Hablo de él, curioseo sobre el tema, escribo alguna cosilla en los foros pertinentes, pero a pesar de ser partidaria como el cura del chiste, practico la abstención. Menos mal que la primavera empieza a manifestarse y es de esperar que despierte la bestia dormida (dicho sea exagerando).

Lo que si es verdad es que el primer artículo de este blog iba a ser un comentario sobre el Marat-Sade que está representando Animalario en gira por varias ciudades.

En 1968 se estrenó en Madrid. En aquellas tres únicas y míticas representaciones una pequeña fracción de la izquierda cultural que vivía en la España franquista vivió su particular revolución. No fue, no podía ser, el Mayo Francés, pero para los que lo vivieron fue algo inolvidable. Me encanta oírselo contar a los compañeros. Yo tenía siete años. He encontrado este enlace para nostálgicos.

El caso es que casi 30 años después, la dictadura ha desaparecido, la democracia es irreversible y “estricto senso” la Revolución ya no es necesaria. Las referencias “modernas” incluidas en el texto sobre el Rey o Esperanza Aguirre provocan risa. Un Padrenuestro que me cuesta creer que se dijera en su momento por blasfemo (y eso el Régimen lo llevaba fatal) hoy no escandaliza a nadie. Políticamente es interesante por las teorías que expresa, pero Marat ya no tiene razón de ser en la España de hoy.

Nos queda Sade. Y ahí sí. Sólo cuando el Marqués se dirige al público y le invita a mirarse, a desearse, a tocarse, se produjó en el teatro ese silencio intenso de los que están sobrecogidos. Alberto San Juan nos provocaba (difícil resistirse) y la mayoría de los espectadores se notaban incómodos. Tuve que reprimir las ganas de seguirle el juego. Lamente profundamente no ser del reparto. Los actores fingían una orgía, se desmelenaban, nos tiraban cosas (menos mal que pude devolver algunas). Nos habían invitado a follar todos con todos y no nos habíamos atrevido.

Es teatro, ya lo sé, pero yo salí convencida de que el sexo libre, sin miedos, sin ataduras es nuestra revolución pendiente.

Por cierto el montaje es estupendo, los actores están estupendos, la obra es estupenda...y Alberto San Juan está muy sexi con el pelito largo y suelto.

domingo, 13 de mayo de 2007

La "dolorosa" anual

Ha empezado hace un par de semanas la campaña de la Renta. Recuerdo que en Yo, Claudio la prostituta que compite con Mesalina le explica que ella cobra por acostarse con hombres porque ese es su trabajo; su hobby es la jardinería y por ella no cobra. Yo me distraigo haciendo declaraciones de hacienda. Desde que existe el PADRE ya no es tan divertido, pero como tampoco tengo tanto tiempo como antes sigo haciendo la docenita anual.

Este rollo es para comentar las casillitas del 0,5239 %(hay que fastidiarse con la cifra) para la Iglesia Católica y/o para fines sociales. El de la Iglesia por fin desaparecerá el año que viene. Yo pensaba que ese pago absolutamente contrario a los deseos de los ciudadanos de un estado laico tendría que haber desaparecido a mediados de los 80, pero han tenido que pasar más de 20 años. Los políticos siempre a remolque de los ciudadanos.

Conviene recordar que hay muchos “civiles” que trabajan en las ONG. No son voluntarios que ofrecen su tiempo libre sino profesionales que cobran por lo que hacen. Me parece lógico lo que no hago es considerar más “bueno” al sanitario que trabaja para Cruz Roja que al que trabaja en el SAMUR. En los últimos años nos hemos dedicado a desvestir a un santo para vestir a otro. “Médicos sin fronteras” nos parecen geniales y los “Misioneros Combonianos” unos cutres aunque realicen trabajos muy parecidos.

Por supuesto que el estado debe financiar todas estas actividades sociales a través de nuestros impuestos. Para eso los pagamos. Y para construir carreteras, desarrollar el comercio y la industria, pagar a los políticos, a la Casa Real, a las Fuerzas Armadas...

Con mi voto en las Elecciones Generales, se supone que expreso lo que quiero que se haga con mi dinero. Al fin y al cabo un Gobierno no debe de ser nada más que un administrador honrado de los fondos que se le dejan en custodia.

O me dan la opción de decidir, porcentaje a porcentaje, a qué quiero que destinen mis impuestos, o hagan el favor de quitar también ese hipócrita 0,5239 % para fines sociales. Si se me olvidara marcarla, que me ha pasado, me quedaría el remordimiento de haberle quitado esa mísera ayuda a una mujer maltratada para dársela a Sebastián que tanto la necesita para hacer campaña.
De todas formas hay que pagar. Quien quiera el PADRE que se lo baje de aquí.

viernes, 11 de mayo de 2007

Los Yizadíes: otra cultura a respetar.

La noticia de hace dos días fue ésta. Supongo que pasaron muchas más cosas casi igual de terribles, pero esta chica muerta sirvió para que supiéramos que hay unos hijos de puta que hacen feliz a su dios, en este caso el diablo, si no comen lechuga ni se visten de azul y si además apedrean hasta matarla a una jovencita por convertirse a otra religión o por salir con un chico de otra religión, porque no está muy claro ni creo yo que importe una mierda.
Por si alguien no sabe de qué hablo añado el enlace a la noticia. Yo me niego a poner el video, como hago otras veces. No sabría explicar por qué.

miércoles, 9 de mayo de 2007

La guerra de los niños

Hoy quería hablar de cosas más serias, pero me es imposible. Estoy recuperándome de una batalla que creo que ha ganado él. Nos queda la cena. Ya veremos. ¡SOCORRO!

lunes, 7 de mayo de 2007

Con la boca chica

Creo que ha llegado el momento de confesarlo: me gano la vida haciendo doblaje. No es algo que me guste contar y sólo lo digo cuando me preguntan directamente por mi trabajo. No se trata de falsa modestia sino de comodidad. Naturalmente hay gente estupenda, educada, con interés porque les cuentes cosas de ese oficio tan pintoresco. Pero por desgracia también hay mucho imprudente y mucho maleducado por el mundo. En veintiocho años de profesión (empecé con 18, una baby) me he encontrado de todo y soy capaz de agrupar las distintas reacciones. A saber:

1. “¿A quién doblas?” El que lo pregunta no suele ir al cine y de la tele sólo ve Hospital Central y los programas de cotilleo. Si no doblas a Paul Newman estás jodido porque ya no eres nadie para él. Ahora siempre contraataco con un ¿Tú qué ves? Y me ahorro tiempo.

2. “Yo tengo la voz muy bonita, también podría hacer doblaje”. Sin comentarios.

3. “¿Conoces a fulanito/a? También hace doblaje.” La mayor parte de las veces no te suena de nada el nombre. Hace unos años nos conocíamos todos literalmente. ¿Cómo le explicas a alguien que su amigo o amiga se está tirando un pegote?

4. “Eso es una mafia”. Y ahí te ves sintiéndote culpable de no se sabe qué, explicando que es la única profesión en la que se deja a la gente sentarse a mirar como trabajan los profesionales y se le hace una prueba a todo el que lo pide (hay quienes lo exigen).

La verdad es que me dediqué al doblaje porque tengo facultades para hacerlo y vengo de familia del gremio. Si profundizo un poco más tendría que decir que quería ser actriz pero era demasiado gallina para dar la cara. Si no desafinara como una urraca lo que más me habría gustado ser es cantante (soñar es gratis). La voz es el instrumento más rico que tenemos los humanos para expresarnos. Me encantan los matices del lenguaje, de las pausas.

Hasta que apareció el DVD, doblar a alguien era casi la única oportunidad que tenías para oírlo en V.O. Y yo adoro el cine. Como he dicho por otros blogs, el doblaje es un mal menor; es la forma de hacer llegar las películas a una gran parte de la población que no sabe idiomas, que lee despacio, que no ve los subtítulos. Hay que desear que se haga bien. Con el mismo cuidado que se pone al hacer la traducción de un poema de Keats: procurando respetar las intenciones y la música del original, sabiendo que nunca será lo mismo.

Sí, me dedico al doblaje, qué pasa. Como decía cargado de razón el maravilloso Pepe Ysbert en “El verdugo”: “Mientras exista la pena, alguien tendrá que aplicarla”.

Os dejo un ejemplo de la cara tan dura que puede llegar a tener el personal. Se han atrevido a sacar un libro con las mejores frases de “House” ¡copiándolas del doblaje! Ni se les ha pasado por la cabeza que hay un traductor y un adaptador de diálogos que son los auténticos propietarios de los derechos de autor de la versión española.
Hasta los sexadores de pollos están mejor considerados. ¡Qué le vamos a hacer!

jueves, 3 de mayo de 2007

El enfermo imaginario


Soy de las que piensan que hay que tener amigos “hasta en el infierno”, pero desgraciadamente mi relación con el mundo carcelario tiende a cero. Me encantaría conocer a gente como Thomas Crown o Danny Ocean, pero no tengo el placer.


A lo que voy es a que no sé si De Juana Chaos recibe un trato de favor como preso. No intento aplicar mi sentido común para salir de dudas, porque tengo comprobado que mi sentido común y la legislación vigente no suelen coincidir. Lo que si tengo claro es que como paciente de un hospital público si que no se parece en nada a lo que yo conozco.


He pasado varias veces como acompañante por casi todos los hospitales de la Comunidad de Madrid. No voy al sabido hecho de que haya que compartir habitación con dos, tres y hasta cinco personas más. Ya nos habría gustado estar solitos en alguna ocasión ¿verdad, cariño?, pero estar malito es lo que tiene. Lo que nunca he visto es a un paciente vestirse de calle y salir a la idem mas que el ansiado día del alta. Lo del paseo por el parque o la visita al homeópata, no se lleva por mi ciudad. Lo normal es que te manden a casa con las heridas a medio curar y una pinta más o menos lamentable.





Palabrita que cuando H salió después de su operación de digestivo, sus dos semanitas de alimentación parenteral y las otras dos entre suero y comidita de enfermo, se parecía más (en guapo) al de Juana de la foto en la cama que al de esta última.



Estoy cabreada porque he aprendido a aguantarme con el hecho de que los políticos jueguen con las palabras, brujuleen, retuerzan la realidad según les conviene y hagan todas esas cosas que la panda de incultos que tenemos en el gobierno y la oposición consideran POLITICA, pero que los médicos entren al trapo me parece lamentable.

Pero esto lo debo de pensar yo porque soy muy facha.

sábado, 28 de abril de 2007

La riqueza de las palabras

Un paseo matutino por el interesante blog “Switch off and let’s go” me lleva a esta pataleta.
La RAE (la Real Academia de la Lengua Española) es un invento hispano que por lo visto a los ingleses les resulta de lo más pintoresco. Yo tenía la absurda idea de que servía entre otras cosas para aportar cultura y riqueza al lenguaje; para que no se perdieran los ricos matices de los distintos tiempos verbales o de la variedad de sinónimos; para limpiar, fijar y dar esplendor a la lengua.
La realidad nos indica que no corrigen nunca nada y que pasado un tiempo indeterminado y caprichoso incorporan al diccionario palabras que están más que arraigadas en el uso habitual (gilipollas) y convierten en correcto lo que es una burrada propia de la cada vez mayor incultura.
De qué sirve defender durante años que se dice "cociente intelectual" y no "coeficiente"; que es septiembre (qué bonita palabra) y no setiembre si luego aparecen estos señores y dicen que a partir de ¡ya! todos tienen razón.
Mucho mejor el sistema británico que convierte en verbos todos los sustantivos y viceversa según les parece y se entienden perfectamente entre ellos.
De todas formas seguiré intentando mantener el poco español que aún recuerdo aunque se empeñen en quitarme el modo potencial (o como se llame ahora) y llenarme la vida de pobres subjuntivos.
Disfruto todos los domingos del artículo de Javier Marías en El País. No me importa estar de acuerdo con él o no. El placer de entender que quiere decir lo que dice y no otra cosa es un descanso para mis neuronas hartas ya de tener que adivinar y traducir lo que están leyendo aunque aparentemente sea en mi idioma. No se trata de ¡qué bonito es esto!, sino de ¡qué clarito!
Ojalá yo supiera escribir tan bien como sé leer, pero a cada cual, lo suyo. Para muestra un botón. Os remito al artículo del domingo 8 de abril “Sobre el tontaina y la burla” (Espero no vulnerar derechos de autor)

http://www.elpais.com/articulo/paginas/tontaina/burla/elppor/20070408elpepspag_13/Tes

Pero se me pasa el enfado ante la belleza de estas palabras. La riqueza del idioma. Cómo se puede maldecir y hablar de amor.

jueves, 26 de abril de 2007

La cabra o ¿Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo?

El sábado estuvimos viendo “La cabra o ¿Quién es Sylvia?" en el Bellas Artes de Madrid.

Es muy buena, muy recomendable; está estupendamente interpretada y dirigida, pero lo mejor de todo es que invita al coloquio post-función. Mi hermana lo resuelve diciendo que ella no se enfadaría con él porque entiende que está enfermo. Yo creo que lo que se pretende es dar una vuelta más a la tuerca. ¿Y si está absolutamente cuerdo?

Es un triunfador. Tiene una mujer a la que quiere y que le gusta y se sabe correspondido. Tiene un hijo que es homosexual (¡qué le vamos a hacer!), pero como es liberal se aguanta y lo comprende. Acaba de cumplir los 50 y está en crisis.

Juguemos a imaginar que Silvia es una rubia despampanante ¿sería Martín menos hipócrita? Stevie, su esposa, se sentiría igualmente traicionada. La excusa del amor y la ternura para justificar el polvo sería igual de pobre. Martín necesita justificar que le gusta follar con otra intentando convencernos de que se “han enamorado” y varias frases bucólicas más.

No comparto la zoofilia. No me pone nada de nada, aunque es evidente que a miles de personas sí. Existe y no va a desaparecer por muchos adjetivos que le añadamos. El sexo en sus múltiples variantes será un tema recurrente en este blog (como en la vida misma) pero no hoy.


Que Silvia sea una cabra no deja de ser el McGuffin de la historia. Supongo que para muchos resulta llamativo y escandaloso; para mi lo irritante es ese empeño de llamar amor al sexo. Creo que Stevie lo entiende así. Martín dedica a esta nueva hembra a la que acaba de conocer, con la que no tiene nada en común (ni siquiera el lenguaje) y que para colmo es de suponer que es bastante estúpida, la misma consideración que a su mujer. Es lógico que se cabree. (El juego de palabras salió solito)

miércoles, 25 de abril de 2007

It' show time, folks! ¡Allá vamos!

Alicia Liddel fue un personaje real, pero consiguió lo que todos los lectores voraces hemos deseado siempre: Protagonizar sus propios cuentos. Las “Alicias”, es decir los dos libros que Lewis Carroll escribió para ella, me han gustado siempre. Sobre todo desde que a mediados de los 70 pude leerlas en la edición de Alianza Editorial (Libro de bolsillo -Biblioteca juvenil) traducida y anotada por Jaime de Ojeda muy inspirado por la versión anotada en inglés de Martin Gardner. Son un placer para los amantes de los juegos de palabras a los que tan aficionados son los ingleses.Pero este texto es para explicar el por qué del nombre del blog. La Alicia que más me fascina no es tanto la del Pais de las Maravillas, que cae en la madriguera por accidente, como la aventurera que se pregunta cómo será el mundo que hay al otro lado del espejo y decide entrar en él para averiguarlo. Alicia es, aparentemente, una típica niña victoriana (el paradigma de lo convencional) y yo soy, aparentemente, una típica mujer de edad media y clase media (que vive en Madrid y no en la Tierra Media, pero eso es otra historia). Lo que nos hace no ser realmente lo que aparentamos es la curiosidad.A veces me las apaño para engañar al tiempo y puedo leer un libro, ver una película, ir al teatro, navegar por la red, dedicar un rato al periódico, ver una serie en la tele... Entro en los espejos y seguiré haciéndolo mientras el Rey Rojo siga soñandome. Un blog es un deseo de permanencia y un inmenso acto de egolatría. No sólo crees que tienes “algo” que decir, sino que además pretendes que te escuchen. ¡Alucinas! Pero si puedo hacer más trampas, contaré en esta página lo que me encuentre y seré muy vehemente al expresar mi opinión porque “las estirpes condenadas a cien años de soledad, no tienen una segunda oportunidad sobre la tierra”.... o sea, por si acaso..(http://es.wikipedia.org/wiki/Alice_Pleasance_Liddell)